martes, junio 14, 2005

Carta abierta a un extraterrestre

Querido compañero:

Quizá te sorprenda que, después de tantos años (¿luz?), haga uso del "transmisor taquiónico" que te tomé prestado (je, je) en tu última visita a la Tierra. Bueno, la verdad, todavía no te he perdonado que me introdujeras aquella sonda por ya sabes dónde tras mi abducción, pero creo que ibas de buen rollo. Aunque a veces me entra la duda: ¿era en verdad una sonda, aquello? Chi lo sa, amigo Sancho. Prefiero pensar que sigo siendo virgen en ese flanco de mi organismo (no, coño, flanco no es el anterior jefe del estado).

¡Qué maravilla! Creo que el aparatito funciona, ¡y de qué manera! Lo acabo de conectar a mi PC y el ancho de banda llega hasta Tokio. Yo siempre pensé que eso de enviar información a velocidades superlumínicas era un camelo (no hombre, camelo no es ese blogger del que te hablé en una ocasión), pero veo que me equivocaba. Aprovecho pues que la cosa va viento en popa para ir al grano (o para que el grano vaya a mí) y ponerte al corriente de las últimas novedades astronómicas. Aprietate los machos, tío, que la cosa se pone fea. Para los fascistas siderales como tú, claro está.



Hemos localizado ya vuestro plasneta. Bueno, po fale, quizá tardemos mil años en descubrir los taquiones esos, y no os podamos hacer una visita hasta entonces. Pero si este transmisor cae en malas manos -de los anglocabrones, por ejemplo; je, je- ese plazo se podría reducir un huevo. Qué mal, ¿verdad? Por si con eso no tuvieras suficiente, sugiero que te leas esto. Sí, es terrorífico... Así me gusta, que te acojones, hijo de puta. Ya está bien de ir dando por culo a la gente y de ir en el OVNI como un chulo piscinas cualesquiera. Ahora, a través de la UNESCO, vais a recibir -vosotros, los extraterrestres- una transfusión de amor al prójimo y de cultura, que buena falta os hasce. Comenzando por vuestro plasneta y terminando hasta el infinito y más allá. Si no te gusta, dos tazas.

Avisado estás.

Sayonara!

1 comentario:

Reboot, El Diablillo Cojuelo dijo...

"gira cada 1,9 días en torno a su estrella"

Joder, me recuerda a la canción de Crowed House: Four seasons in one day.