domingo, julio 10, 2005

Sin pila de agua bendita, pero arrullados por los acordes de «La bella y la bestia» y las emocionantes palabras del poema «Ítaca» de Kavafis, los bebés Irati Novo Berciano y Pelayo Cordal Calvo recibieron en la mañana de ayer su bienvenida a la comunidad, en los primeros «bautizos civiles» que se celebran en Asturias.
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2 comentarios:

. dijo...

Se demuestra, pues, que bodas, bautizos y comuniones no son más que actos sociales en los que la gente se proyecta frente a los demás. Lo siento por los curas: todo esto demuestra que los que acuden a la parroquia para el ivento, no tienen ningún sentimiento religioso verdadero. Lo que a la gente le gusta, es disfrazarse y jugar al teatro. Inventarse el bautizo civil es el típico producto de la izquierda gilipollas, que no sabe que no es de izquierdas ni socialista, sino más carca y cateta que la puñeta. Pero se llama progre.

Anónimo dijo...

Si la iglesia es tan mala, si la regilión católica es perjudicial,si todavia hay gente que cree que la religión es el opio del pueblo...¿por qué los imitan tanto?.
Que no ofende a nadie dice el alcalde, pues yo creo que si...ofende al sentido común.