La Alianza entre Mamones, a pesar de su carácter supranacional (no en vano, se dio a conocer oficialmente en la Asamblea General de la ONU), también persigue establecer acuerdos intermamónicos dentro de eso que una vez se dio en llamar España. José Luis Rodríguez Zapatero, consciente de que la paz mundial comienza por uno mismo, ya ha puesto manos a la obra, orando et laborando como buen mamón. Encomendándose a la Santísima Trinidad Laica (Diálogo, Consenso y Talante) ha conseguido él solito lo que hasta hace escasos periodos menstruales parecía impensable: que la paz se presintiera al más puro estilo "el sexto sentido", se viera en el aura del prójimo a través de una cámara kirlian, se oliera en el pestazo a explosivos, que casi se pudiera tocar con la punta de los dedos, ya que por obra y milagro de una sonrisa los terroristas están a punto de abrazar la metrosexualidad y se van a dedicar al cultivo del gladiolo.