Ante esta lógica totalitaria, los ateos, los no creyentes, es decir los pensantes, callamos y sin quererlo otorgamos. Aburridos y resignados, seguimos inactivos y expectantes desde el respeto radicalmente democrático, aunque excesivo, a la actividad religiosa, a pesar de ser conscientes de que el totalitarismo religioso tiene secuestrado el espíritu laico de nuestra sociedad, tanto social como individualmente. Ni que decir que el drama de los pensantes y laicos en el ámbito islámico estremece. ¿Hasta cuándo hemos de seguir en silencio conviviendo e incluso asumiendo la imposición de prácticas sociales y normas de conducta impuestas por la Iglesia, totalmente extemporáneas con las formas de actuar y de vida de la gran mayoría de la sociedad? ¿Qué correlación estadística existe entre el número de bautizos, bodas, comuniones y funerales, casi todas por imperativo social y al margen de la voluntad (sobre todo en los funerales) «del protagonista», y la práctica religiosa cotidiana?Más en "La paja en el ojo ajeno" de Gabirel Ezkurdia
Vía El Pez
5 comentarios:
Al autor no se le olvida sólo el hecho de que los hay que piensan y, aún así, creen, sino que también se le pasa el pequeño detalle de que algún "no creyente" existe que no está, necesariamente, en contra de la religión y de sus actos. La confusión entre "no creencia" y "beligerancia anti-religiosa" es un error más que común.
Es que puede haber mucho de totalitario en esa petición de principio de que sólo los no creyentes piensan. Sería más creible tu planteamiento si nos dejaras los dogmatismos a los creyentes. De un no creyente absoluto, si es pensante -y creo que tú lo eres-, yo espero, cuando menos, una pizca de realitivismo.
Que va.. si los ateos son tambien una religión. Para ser verdaderamente ateo hace falta tener conocimiento infinito para no necesitar creer en nada.
No todos, Guille; además de diversas variedades religiosas de ateos, estamos los de variedades no religiosas.
No hay cosa que cause más mal que las religiones, nos empujan a empeñar nuestras conciencias aceptando lo que venga porque "Dios lo quiso así", de una manera irresponsable haciéndonos creer que todo es asunto de la divinidad.
Publicar un comentario