viernes, diciembre 16, 2005

Un traidor en el Ministerio de Exteriores cubano

Qué suerte la mía... Resulta que vuelvo a postear en la Alianza entre mamones, y me encuentro uno de esos artículos en Rebelión que dan ganas de morirse de la risa...

Cuba pidió hoy una reforma radical de la Organización Mundial de Comercio (OMC), que le permita responder con políticas nuevas y efectivas a los intereses de la gran mayoría de sus Estados miembros.[...]
En su discurso, el representante de Cuba afirmó que esas nuevas políticas deben tener como objetivo primario el desarrollo social de los pueblos hoy desfavorecidos, y no basarse en doctrinas neoliberales ni exclusivamente en el comercio para resolver los problemas acuciantes del tercer Mundo.


Claro, las doctrinas neoliberales están perjudicando a los pueblos más desfavorecidos, por no hablar del Tercer Mundo... Nada nuevo hasta ahora...
Denunció que se exige a los países del Tercer Mundo la apertura de sus mercados de productos no agrícolas y de servicios, con lo que se les obliga a abandonar sus procesos de industrialización, a cambio de supuestas ganancias. El jefe de la delegación cubana destacó la persistencia de políticas proteccionistas y afirmó que ello convierte el discurso del libre comercio en una retórica vacía que sólo sirve para cubrir los intereses de lucro de los países desarrollados.

¿Mande? ¿Pero no eran los malévolos neoliberales los que pedían que las políticas proteccionistas debían desaparecer? ¿Qué demonios hace un ministro cubano demandando mercado libre? ¿Pero eso no es el neoliberalismo?
Cuba apoya y respalda las demandas de los pequeños países caribeños contra la política discriminatoria de la Unión Europea hacia el azúcar y el banano, que los afecta, subrayó Cabrisas. El ministro afirmó que el comercio internacional, sobre la base de sus reglas actuales, es cada vez más inequitativo y profundiza las desigualdades entre las naciones y dentro de las naciones.

¡¡E insiste, el muy insensato!!
Es imprescindible exigir el cumplimiento efectivo de los compromisos suscritos por los países desarrollados y adoptar las acciones necesarias para modificar los acuerdos existentes, eliminando los desequilibrios impuestos por presión política y económica de los principales países industrializados, añadió.

Dios mío, ahora nos sale con George Stigler...
Sólo así, dijo, se podrá aspirar a la eliminación del proteccionismo y las medidas unilaterales, a la solución del endeudamiento externo de los países en desarrollo y de los menos avanzados, y a reducir la brecha entre el Norte y el Sur.

Y esto parece del "Economía liberal para no economistas y no liberales" de Sala i Martín...

Confiemos en que las buenas relaciones de nuestro gobierno con el cubano no impidan que este político pueda exiliarse en España... Pero permítanme que me pregunte... ¿Cómo es posible que un buen estado socialista permite este tipo de infiltraciones en su seno?

2 comentarios:

Reboot, El Diablillo Cojuelo dijo...

¡QUÉ ALEGRÍA VOLVER A LEERTE!

Alexander Miles dijo...

Gracias, un placer estar aquí con vosotros.