Como bien apuntan los gurús habituales de la sociedad de la información, el poder de las redes telemáticas no conoce límites y su potencia no tiene paragón. El que toca red, toca poder. Los que permanecen ajenos a este fenósmeno social viven en la ignorancia e indefensión. Y es que el que domina el arte de netear se hace metafóricamente con la espada Excalibur en una mano y con el Santo Grial en la otra. Con el absolute power. Ya no hay enemigo en la tierra ni en el cielo que te pueda hacer caer de hinojos.
Eso es, al menos, lo que han descubierto hoy un grupo de internautas gallegos. Esperaban -gracias a Internet- formar una cadena humana que abarcara como mínimo dos kilómetros y lo han logrado (siempre y cuando cada persona ocupe como poco veinte metros de diámetro).
domingo, junio 26, 2005
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
Hombre, David, la envergadura media quizá ha subido mucho con la presencia del eximio intelectual Suso del Toro; así que a lo mejor han llegado a los dos kilómetros...
Publicar un comentario