(Nota: Para mí, un pepino es una genilidad propia de Pepiño Blanco, de la misma forma que una maragallada es un destello de genialidad del gran e irrepetible Pasqual. Son formas de referirse a las manifestaciones artísticas que se salen de lo común, en aquellos seres verdaderamente excepcionales.)
Lo reconozco, el hombre que da título a este post es de los políticos de izquierdas que me caen mejor. Ojalá ZP le nombre ministro, a ser posible en esta legislatura. Siempre que me falla la inspiración a la hora de postear, sé que puedo recurrir a él, como mina perenne de inspiración. Hasta ahora, como los buenos amigos y los viejos vinos, jamás me ha fallado.
Hoy, se sale: 'El secretario de Organización del PSOE, José Blanco, afirmó hoy que el Partido Popular "está aislado políticamente" y le avisó de que si sigue por el mismo camino quedará también "aislado socialmente".' Se debía referir, claro está, a esto.
Y es que por muchos millones de seres humanos que respalden a uno y estén de nuestra parte, siempre vivieremos en soledad y marginación social hasta que el bueno de Pepiño nos obsequie con su bendición urbe et orbe. Amén.
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