Siempre han existido guardianes de la fe entre los integrantes de las izquierdas, y mayor la cantidad cuanto más se inclinan hacia el extremo. Gentes hay que tienen claro lo que sea exactamente ser izquierdas y, por tanto, están en condiciones de revelarnos la herejía. Es bien conocida la tradicional costumbre entre algunos sectores de la izquierda de negar que otros sean merecedores del título. Afortunadamente, carecen los inquisidores de poder en este país como para que la traición al dogma pueda costarte un disgusto.
La capacidad de las izquierdas para mirarse el ombligo es ciertamente notable, y a esa actividad han dedicado muchos buena parte de su tiempo. Pero no soy experto en esencias, ni tengo interés en discutir la escolástica, así que me limitaré a un criterio más pedestre para establecer mi propia consideración
sobre la pertenencia a este club de las izquierdas.
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2 comentarios:
Pero... a ver, ¿no estábamos ya todos de acuerdo en esto?:
Izquierda = bueno
Derecha = malo
Liberal = Derecha = malo
La cosa tiene jugo. A lo anterior, se aplica algo que se parece a la propiedad conmutativa:
Malo = derecha
Bueno = izquierda
Es decir, un huracán, que es malo por definición, es, por tanto, de derechas.
como vamos a excomulgarle si muchos miembros de esa red estamos de acuerdo?
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